Soneto lingüístico número 26
Me dieron un pasquín el otro día
que exhalaba un tufillo no fragante,
ese olor que despide el ignorante
que a la ignorancia suma su osadía.
Más o menos así es lo que decía:
«Si el adverbio quizás está delante
de palabra que empieza en consonante,
la ese del final yo quitaría.
»Pero la dejaré si al lado tengo
palabra con vocal inaugurada;
y es ley de los lingüistas, te prevengo».
Jamás oí mayor barrabasada:
de acatar tal dislate yo me abstengo
porque no es ley, sino una gran burrada.1
Ramón Alemán
1 Esta supuesta regla, que no es tal, circula desde hace bastante tiempo en diferentes ámbitos lingüísticos, e incluso algunos correctores de textos la han adoptado «por su cuenta y riesgo», como señala el ortógrafo José Martínez de Sousa en su Diccionario de usos y dudas del español actual (Ediciones Trea). Lo cierto es que no existe regla alguna al respecto: con independencia de que la palabra que viene después comience por vocal o por consonante, se pueden usar indistintamente quizás y quizá, que significan lo mismo, aunque Manuel Seco señala en su Diccionario de dudas y dificultades de la lengua española (Espasa) que la forma más usada parece ser quizá.